El Olivar de Alto Hospicio

En el marco del Plan Integral del año 2000, se ejecutaron distintas obras que servirían para el desarrollo urbanístico de La Pampa y El Boro en Alto Hospicio, un mega proyecto que contempló estudios que permitieron ejecutar varias mejoras como intervenir y ampliar las plantas de tratamiento de aguas servidas al doble de su capacidad para ese momento, cuyo trabajo fue realizado por la empresa local G.A.A. Ingeniería & Proyectos Ltda.

Posterior a estas labores, la empresa dirigida por el ingeniero civil iquiqueño, Gustavo Aranibar Alliu, presentó un proyecto de forma gratuita que permitiría la siembra de más de tres mil olivos sobre la superficie de 16 hectáreas regadas a través del sistema de goteo con origen en aguas servidas tratadas.

Y así fue, “nadie creía que iba a funcionar, que esa idea serviría para que decenas de familias generaran un proyecto autosustentable que, una vez licitado, podía transformarse en una Alternativa de Desarrollo Productivo (ADP) para Alto Hospicio” indicó Aranibar Alliu.

El ingeniero detalló que el proyecto consistió en elevar el agua tratada a través de bombeo a un estanque de cabeza mediante un sistema de regadío 100% automático, aplicando el principio del considerado padre de los fluidos, el matemático Daniel Bernoulli, quien describe el comportamiento de un fluido al moverse a lo largo de un conducto cerrado.

Una innovadora idea que expuso la factibilidad de cultivar en el desierto más árido del mundo.

En la actualidad, de acuerdo a la gerencia de Aguas del Altiplano, el proyecto iniciado a principios del siglo XXI se emplaza en una superficie de 13 hectáreas y cuenta con unos 8.000 árboles plantados, en el cual se efectuó un mejoramiento por 90 millones de pesos en todo el sistema de riego, en el año 2014.

Además, el considerado Parque Los Olivos cuenta con un plan de manejo a cargo de una empresa especializada. Este plan incorpora faenas de desmalezado, fertilización, poda y control de plagas, además de la reforestación de nuevos olivos. No obstante, desde fines de 2019 el regadío se realiza con agua potable, producto del cierre de las lagunas de Alto Hospicio.

Redacción y Fotos/LaQuinta